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Bienvenidos al emplazamiento histórico de Andersonville. Este lugar fue autorizado por el Congreso en octubre de 1970 como parte del Servicio de Parques Nacionales. Durante muchos años, antes de esta autorización, el cementerio y la prisión eran administrados por el Departamento del Ejército. Entre los años 1890 y 1910, la prisión estaba al cuidado del Gran Ejército de la República, que era una organización de veteranos militares y su auxiliar, el Cuerpo de Asistencia de Mujeres, como un memorial para los prisioneros de Andersonville.

 

Andersonville en Georgia, era el lugar del campamento para prisioneros de guerra durante la Guerra Civil. De los aproximadamente 45.000 soldados de la Unión que estaban prisioneros en Andersonville, cerca de 13.000 murieron durante su confinamiento. Pero, ¿por qué tantos?

 

Ahora pueden salir de su lugar de aparcamiento. Este tour está diseñado para ayudarles durante su visita. Tengan la libertad de detenerse en cualquier momento y exploren por su cuenta.

Existen un número de exposiciones a lo largo de la zona de la prisión y están diseñados para ayudarles a entender la historia de Andersonville, por ello por favor salgan de sus vehículos para poder mirarlos. Cuando salgan de sus vehículos, por favor recuerden que deben parar el audio, para que cuando vuelvan, puedan continuar con el tour. Este tour está diseñado para una velocidad de 10 millas por hora. Por favor conduzca a esa velocidad para que los lugares que pasen puedan coordinarse con el tour que también tiene paradas numeradas. Cuando vuelvan del tour, la persona encargada en la recepción del museo podrá responder cualquier pregunta que puedan tener después de su visita.

 

En la señal de stop, giren a la izquierda. Por favor tengan cuidado con el tráfico que pueda haber antes de proceder.

 

Sigan las señales que llevan al lugar de la prisión. Por favor, paren en la zona derecha de la carretera en frente del monumento de Wisconsin, el cual estará a su izquierda. Esta será la parada del tour número 1.

 

Al comienzo de la Guerra Civil, ninguna de las partes estaba preparada para un conflicto que durara mucho tiempo. Las partes enfrentadas estaban convencidas de que ésta sería una guerra de corta duración. Por lo tanto, nadie consideró quedarse con los miles de soldados enemigos

 

que, eventualmente, serían tomados prisioneros. Al ver que la guerra continuaba, hubo una evidente y crítica necesidad de mantener a estos prisioneros. Al principio, los dos bandos usaron un sistema de libertad condicional, muchas veces incluso en el lugar de batalla. Los prisioneros se comprometían, por su honor, a no luchar más y a ir a sus hogares hasta el momento en que fueran intercambiados.

 

Este sistema poco a poco terminó fallando y viéndose impráctico, forzando a los dos bandos a mantener a sus prisioneros. Un sistema de intercambio formal de estos prisioneros fue creado en julio de 1862. El sistema fue gobernado por el Dix-Hill Cartel, que era un documento que especificaba la valía de cada soldado dependiendo de su rango. Sin embargo el documento creó muchas dificultades y pronto fracasó. Adicionalmente, la Unión descubrió que era ventajoso el no intercambiar soldados. Como resultado, grandes prisiones como Andersonville fueron establecidas.

 

Las primeras prisiones para los detenidos de la Unión estaban localizadas dentro o cerca de Richmond, Virginia, que era la capital confederada. En 1863 la cantidad de prisioneros en Richmond había crecido al punto de que estaba causando un desgaste en la cadena alimenticia de la ciudad. Richmond estaba siempre ante una amenaza de ataque y el General Robert E. Lee decidió que la presencia de los cautivos del norte podría ser usada en el caso de que un ataque ocurriera.

 

El gobierno confederado empezó a buscar lugares alternativos para las prisiones más tarde en el año 1863. Finalmente, Camp Sumter fue construido cerca de una comunidad en el suroeste de Georgia, en Andersonville, que tenía una población de 20 personas aproximadamente. Este lugar fue elegido por su cercanía al ferrocarril, la presencia de un arroyo para poder usarse como suministro de agua, la buena temperatura, la abundancia de materiales de construcción y la disponibilidad de comida en las zonas cercanas. Adicionalmente el suroeste de Georgia en ese momento estaba lejos de la zona de guerra.

 

En enero de 1864 esclavos AfroAmericanos que fueron tomados de las plantaciones cercanas empezaron a despejar los campos y terrenos. Durante las siguientes seis semanas, el sonido de las hachas, la caída de los árboles y el golpeo de las palas resonó mientras a la tierra arenosa le retiraron sus pinos altos. Cortaron troncos con una longitud de 20 pies, y los prepararon a mano para que pudieran todos encajar correctamente. La madera fue puesta verticalmente en una

 

zanja de 5 pies de profundidad. El diario de un prisionero mencionaba que el muro de madera era tan ajustado que, por la noche, no se podían ver las hogueras de los guardias a través del muro.

 

El primer grupo de prisioneros llegó el 24 de febrero de 1864, cuando sólo se habían completado 3 muros. El cuarto lado entre las dos puertas de entrada tenía que ser protegido con artillería hasta que el muro fue terminado. La prisión, de 16 hectáreas y media, estaba originalmente preparada para contener 6.000 prisioneros pero estaba construida para acomodar 10.000. Sin embargo, la población de esta prisión había remontado a 25.000 en junio. Una expansión de 10 hectáreas fue añadida en la zona norte del recinto y fue abierta el 1 de julio de 1864, lo que supuso que el tamaño de la prisión dentro de sus muros fuera de 26 hectáreas y media. El muro originario, en la zona norte de la prisión, estaba en una línea de este a oeste cerca del monumento de Ohio con forma de obelisco. Aunque 26 hectáreas y media parece una superficie muy grande, tengan en cuenta que eran 33.000 hombres confinados durante su momento de máxima capacidad en agosto de 1864. Adicionalmente, había 4 hectáreas más de tierra pantanosa a lo largo del arroyo que eran inhabitables. Todo esto llevó a una situación bastante confinada.

 

Al ir alrededor de la prisión, los postes de hormigón y los marcadores de piedra les mostrarán el contorno de la prisión ampliada. Los postes de hormigón internos marcan la localización de una pequeña barandilla de madera. Esta cerca básica, conocida como el límite (deadline), fue establecida por las autoridades de la prisión al final del mes de marzo de 1864 para hacer más difícil la posibilidad de escapar. Los guardas tenían órdenes de disparar a cualquier prisionero que osara traspasar el límite. Separados cada 80-100 pies, había 52 torres de seguridad llamadas por los prisioneros “dormideros de palomas”. Estas daban a los guardias una zona para observar el interior de la prisión. Aunque no sabemos el número exacto de personas asesinadas en la zona del límite, sí sabemos que muchas veces esto ocurrió.

 

Por favor continúen conduciendo alrededor de la prisión bajando la cuesta hacia el arroyo. La siguiente parada, número 2, está al final de la cuesta. Cuando lleguen allí, por favor aparquen en la zona de aparcamiento a su izquierda.

 

Dos compuertas, ambas localizadas en el muro de la zona oeste, daban acceso a la prisión. Cada una de ellas tenía dos puertas y formaban un pequeño cercado. Una de las puertas daba acceso a

 

la prisión y la otra al exterior. Una de ellas estaba siempre cerrada y las dos estaban protegidas todo el tiempo.

 

Los nuevos prisioneros entraban a través de la Puerta del Norte, localizada en el lado norte de la cuesta de la prisión, donde recibían su primer acceso a Andersonville. Antes de entrar, eran separados en grupos de 270 hombres, que luego serían divididos en escuadrones de 90 y 30 con el propósito de recibir las raciones de comida. Al lado izquierdo en la zona de la cuesta hay una reconstrucción de la Puerta del Norte y una sección del Muro del Oeste. John McElroy del grupo 16 de caballería de Illinois escribió acerca de su primera impresión de Andersonville:

 

“500 hombres agotados se movían lentamente entre las dos filas de los guardias. 500 hombres se movían en silencio hacia las puertas que cerrarían sus vidas y esperanzas para siempre en muchos de los casos. A un cuarto de milla desde el ferrocarril vinimos hacia un gran empalizado hecho de grandes troncos en forma cuadrada instalados verticalmente en la tierra. Los fuegos ardían y nos mostraban una parte de estos troncos y dos puertas inmensas con bisagras y tornillos de hierro. Estas se abrían mientras estábamos allí y pasábamos a la zona siguiente.

Estábamos en Andersonville”.

 

 

El arroyo, que pueden ver atravesando la zona de la prisión, se llama Stockade Branch, era el principal suministro de agua para los prisioneros, y fue una de las razones principales por las que la prisión se instaló aquí. De este pequeño arroyo los prisioneros obtenían agua para beber, bañarse y lavar su ropa. En adición a esto, los inodoros o restrooms, como los llamaban en esa época, estaban construidos a lo largo de este arroyo en la zona de bajada del río al lado del campamento.

 

El arroyo tenía un suministro de agua suficiente para los 6.000 o hasta 10.000 hombres a los que la prisión estaba diseñada a acoger . Sin embargo, con el exceso de personas, el arroyo fue rápidamente abusado. Desperdicios y basura procedentes de la zona de la cocina y de los campamentos de los guardias contaminaron el arroyo antes, incluso, de que el agua entrara en la prisión. En su búsqueda por un suministro de agua mejor algunos prisioneros encontraron manantiales salobres a lo largo de la ladera, e incluso excavaron pozos. Frecuentemente, los que encontraron agua la vendían a sus compañeros de prisión. John Ransom, uno de ellos, escribió en su diario el 18 de mayo:

 

“Algunos de los pozos, excavados por los Yankees, proveyeron agua aceptable, que fue una mejora comparada con el agua de pantano. El agua del pozo, que estaba muy solicitada, se vendía fácilmente por cualquier cosa que los prisioneros tuvieran para intercambiar”.

 

Durante el verano caluroso de 1864, la necesidad de agua de los prisioneros fue tan grande que empezaron a rezar a Dios para que los ayudase. En agosto, una gran tormenta transformó el arroyo de Stockade Branch en un torrente que se llevó parte del muro de la prisión. A la vez le dio al campamento un necesario lavado. De acuerdo con la leyenda, durante la tormenta, un trueno tocó suelo. Durante una investigación otro manantial fue descubierto donde ese relámpago había caído. Muchos prisioneros creyeron que esta era la respuesta a sus oraciones, se le llamó el Manantial de la Providencia.

 

John Ransom escribió el 13 de agosto, “ un manantial de agua fresca ha aparecido en el campamento. Casi suficiente para proveer a todos los aquí presentes con agua para beber. Dios no se ha olvidado de nosotros”. El edificio conmemorativo cerca del Manantial de la Providencia fue construido en 1901.

 

Ustedes pueden salir de sus vehículos y caminar a lo largo del manantial para verlo más de cerca, también pueden subir la cuesta para explorar la Puerta Norte que fue reconstruida. Recuerden que deben parar esta grabación para que cuando vuelvan esté preparada.

 

Continúen con el tour. Por favor, diríjanse al lado derecho de la carretera mientras se aproximan a las dos columnas de piedra que se encuentran a su izquierda. Esta es la parada número 3.

 

Localizada a la izquierda del puente está la zona de cocina. Esta fue originalmente dedicada a proveer a los prisioneros con comida. Sin embargo, y debido a la escasez de madera, ladrillos y utensilios para cocinar, esta cocina no estuvo preparada cuando el primer grupo de prisioneros llegó a Andersonville. Finalmente, cuando estuvo lista, el número de personas en la prisión ascendió mucho, por lo que esa cocina no estaba adecuada para esa cantidad. Muchas de las raciones estaban crudas, estropeadas o infestadas de insectos. Había mucha ansiedad por obtener comida, con muy poca variedad alimenticia lo que causó deficiencias severas. Este problema, combinado con las condiciones de superpoblación, acomodamientos inadecuados y deficientes condiciones sanitarias, llevó a las infecciones generalizadas de enfermedades y a un nivel alto de mortalidad entre los prisioneros.

 

Las columnas a su izquierda marcan la localización de la Puerta del Sur. Los prisioneros que murieron dentro de la zona fueron enterrados allí. Después los cadáveres fueron llevados al mortuorio, que se encuentra a su derecha. Este mortuorio fue construido simplemente con ramas de pinos. Allí es donde se dejaban los cuerpos hasta que fueran transferidos por los vagones al cementerio.

 

Era costumbre que los amigos de la persona muerta se quedaran cerca de él en la Puerta del Sur, lo que les daba la oportunidad de llevar a su amigo al mortuorio y, mientras caminaban, podrían recoger pequeños troncos de madera, que eran muy valiosos en tiempos de necesidad. Al menos un hombre intentó escapar al pretender estar muerto y ser llevado por sus amigos al mortuorio. Charles Mosher, del regimiento 85 de Infantería en Nueva York, escribió en su diario el 16 de junio:

 

“Han habido varios casos en los que un yanki ha pretendido estar muerto, y sus amigos ataron una tela alrededor de su cabeza para mantener la mandíbula en su lugar, ataron sus dedos de los pies juntos, prendieron un papel en su ropa con su nombre, compañía y regimiento; y luego de una manera solemne, llevaron al pobre hombre al mortuorio. Pero el yanki tenía un ojo abierto y buscaba la oportunidad, cuando los guardias no estaban presentes, para poder salir silenciosamente del lugar de los muertos y escapar hacia las fronteras de la Unión”.

 

Por favor, continúen con el tour. A la derecha, en la cima de la cuesta está el Fuerte Estrella, que fue el principal terraplén en el sistema de fortificación alrededor de la prisión. Cuando lleguen a la parte superior de la cuesta, por favor, paren sus coches en la zona de aparcamiento al lado del Fuerte Estrella y la pasarela entablada. Esta es la parada número 4.

 

Temiendo que el ejército del General Sherman atacaría y liberaría a los prisioneros federales, el comandante del Campamento Sumter, el General John Winder, ordenó la construcción del Fuerte Estrella y otras fortificaciones hechas de tierra al final de julio y agosto. Estas fortificaciones fueron construidas muy rápidamente por los guardias de la prisión y esclavos.

Además de estas fortificaciones, otra pared empalizada fue edificada y una tercera se comenzó. Esta tercera fue llamada el “camino cubierto” y, aunque nunca se terminó, conectaba las fortificaciones de los lados norte y este de la prisión. En el caso de un ataque, este muro permitiría a los guardias confederados ir de una fortificación a la otra sin poder sufrir un ataque directo.

 

Aunque el ejército del General Sherman continuó su camino hacia la zona del mar, uno de los oficiales de su grupo de caballería, el General George Stoneman, intentó liberar a los prisioneros aquí. Este intento fue impedido cuando él y otros 500 de sus hombres fueron capturados el 31 de julio de 1864 en Hillsborough, Georgia, aproximadamente 60 millas al norte de la prisión. Había en el fuerte 5 armamentos apuntando siempre a la zona empalizada. Estas armas eran muy efectivas para supervisar y proteger la zona al norte de Stockade Branch. Adicionalmente, un pequeño reducto al oeste de la Puerta Norte tenía tres armas que protegían la zona sur de Stockade Branch. Los prisioneros sabían que el cañón podía disparar el recinto con botes de metralla muy rápidamente. Afortunadamente, esta medida drástica nunca fue requerida.

 

Por favor dirija su atención al campo abierto al lado opuesto del Fuerte Estrella, el lugar del hospital, que tenía 22 naves, de un tamaño cada una de 100 pies de largo y 22 pies de ancho para acomodar a 50 pacientes. Era una gran mejora comparada con los 2 hospitales que precedieron, donde los enfermos estaban en tiendas de campaña. Sin embargo, esto era mucho mejor para los pacientes que para los prisioneros que estaban en la zona empalizada. Las enfermedades eran más prevalentes al tiempo que la población en la prisión crecía. Era evidente que la falta de instalaciones médicas apropiadas y la deficiencia de suministros médicos fue un problema crítico. Los doctores tuvieron que usar su propio ingenio y remedios caseros improvisados para sustituir los medicamentos que no podían obtener. Solon Hyde, un prisionero que obtuvo la libertad condicional y que trabajaba como enfermero, escribió después de la guerra:

 

“El suministro de medicinas era escaso. Había sólo una cantidad limitada de quinina, opio y otras mezclas mercuriales, principalmente hierbas y raíces como por ejemplo frutas de sumac, corteza de roble blanco, fresno espinoso, aliso espinoso, corteza de sauce y cornejo, raíz de serpiente, bayas de enebro y hierbas de sello de oro. Todas estas llegaron y fueron empaquetadas por la dispensería médica confederada en Macon, Georgia”.

 

Pueden salir de sus coches y caminar hacia el Fuerte Estrella. Por favor ayúdenos a preservar esta magnífica estructura y usen las pasarelas o zonas para caminar. Les rogamos que no se suban a los lados del terraplén porque esto podría causar erosión. Recuerden que pueden pausar esta grabación ahora para que pueda estar preparada para continuar cuando regresen.

 

Por favor continúen con el tour. Salgan de la zona de aparcamiento y continúen circunvalando la zona de la prisión a su derecha.

 

Mientras conducen a lo largo de la zona sur del muro de madera, dirijan su mirada a la izquierda y podrán encontrar un poste blanco en la bajada de la cuesta. Este poste marca el lugar donde 6 “Raiders” fueron ahorcados. La falta de orden y las condiciones superpobladas de la prisión permitieron que se formaran grupos de ladrones. Como no había un grupo organizado de policía, estos grupos llamados “Raiders”, tenían mucho poder. Se encontraban en la zona sur donde terminaba el muro de la prisión. Teniendo en cuenta que había que tomar medidas para controlar estos grupos ilegales, los prisioneros se pusieron de acuerdo y crearon una policía informal llamada “los Reguladores”. Con la colaboración del Capitán Henry Wirz, los Reguladores finalmente obtuvieron la ventaja y capturaron muchos de los miembros de los Raiders. Los 6 líderes fueron encontrados y juzgados por un jurado de 24 sargentos de la Unión. Un prisionero actuó como abogado para la defensa. El Capitán Wirz proporcionó libros de leyes para asegurar que la justicia fuera aplicada y todos los procedimientos fueron anotados. Después de que se les declarara culpables, los 6 hombres fueron ahorcados el 11 de julio de 1864. Después de su ejecución, el grupo de los Reguladores continuó con su tarea para mantener al menos cierto grado de orden.

 

Detrás de los terraplenes y más adelante está el lugar del hospital provisional, usado después de que el hospital originario localizado dentro de los muros de la prisión fuera abandonado, y mientras se esperaba a la construcción de la nave hospital a la que nos hemos referido antes. Al moverse de localización de las tiendas de campaña que servían de hospital y que estaban dentro de los muros de la prisión, se dejó mucho más espacio libre lo que facilitó mejores condiciones para los pacientes.

 

Mientras se aproximan al puente verán la parada número 5, que muestra una reproducción de la foto de agosto de 1864 de las letrinas, en terminología moderna.

 

Estas letrinas contribuyeron a la polución del agua para los prisioneros porque se encontraban localizadas sobre el arroyo. Esta agua contaminada propició la aparición de enfermedades como la diarrea, disentería y fiebre tifoidea. Si quieren examinar la foto de cerca, por favor paren esta grabación.

Ahora les rogamos que continúen su trayecto subiendo la cuesta hacia la parada número 6. Esta exhibición contiene la fotografía tomada en agosto de 1864 y muestra las condiciones en que vivían los prisioneros. Las autoridades confederadas no facilitaron materiales de

 

construcción, por lo que los individuos fueron dejados sólos para usar lo que tuvieran a su alcance. Como resultado de esto una mezcla de tipos de refugios fueron construidos, tan simples o elaborados como el constructor decidiera, dependiendo de su imaginación y los recursos que tuviera. Mantas, carpas y piezas de ropa fueron usados para crear cobertizos rudimentarios.

Estos tinglados o shebangs, como los llamaban los prisioneros, sólo ofrecían un refugio muy pobre. Amos Stearns describió en su diario uno de los refugios de un amigo:

 

“El refugio de Champney consistía en dos mantas del ejército ajustadas con clavijas de madera e instaladas en forma de letra A, que con un poncho al final, era un refugio cómodo comparado con lo que tenían la mayoría de los prisioneros”.

 

Cuando vean la fotografía, comparen las vistas que muestran con lo que ven hoy en día mirando al norte. Pueden parar el tour, si lo desean, para seguir comparando.

 

Por favor, continúen el tour hacia la parada número 7. Mientras están en esta parada pueden examinar en más detalle la esquina noreste de la prisión que fué replicada al igual que los refugios.

 

Para suplementar las raciones escasas muchos hombres establecieron tiendas para distribuir cualquier producto que pudieran obtener o preparar, o cualquier servicio que pudieran desempeñar. Estos hombres de pequeños negocios se ocupaban principalmente de las necesidades vitales. No todos los prisioneros tenían los recursos para establecer un negocio. Sin embargo, la mayoría de ellos encontraron algo para ocupar el tiempo libre durante su cautividad. Aunque era común practicar cualquier actividad que ofreciera un alivio del recordatorio diario de ser un prisionero de guerra, la preferida era el pensar en la escapada. Para muchos, la única esperanza para poder escaparse era a través de túneles. Robert Kellogg, un prisionero de Connecticut, recordaba en sus memorias:

 

“La tarea de abrir un túnel ha estado ocurriendo silenciosamente, y esperamos mantenerlo en secreto lejos de los ojos de los rebeldes, pero de alguna manera ellos lo descubrieron, porque el oficial de intendencia de los rebeldes vino con sus hombres y las necesarias herramientas y relleno el lugar, de esta manera destruyendo una esperanza más”.

 

Por favor, continúen a la parada número 8, en el lugar de aparcamiento adelante a su derecha. Mientras conducen a esta parada, miren las pequeñas cercas de hierro a su izquierda. Dentro de ellas están los restos de los túneles de escape y los pozos.

 

El escape era difícil por el alejamiento de Andersonville de donde estaban las líneas de la Unión y por la eficacia del uso de perros para encontrar a los escapistas. Durante la existencia de la prisión, solo 329 prisioneros pudieron escapar con éxito. Muchos de ellos lo consiguieron durante su tiempo de trabajo o infringiendo sus libertades condicionales mientras trabajaban fuera del recinto.

 

El Campo Sumter existió durante 14 meses. Con la liberación de prisioneros al fin de la guerra el muro de la prisión poco a poco se pudrió, pero la historia de Andersonville continuó.

 

Andersonville se ha convertido en un nombre muy conocido en el norte. Fue una de las prisiones militares Confederadas más grande y tenía un número de fallecidos muy alto. Las emociones se elevaron al máximo cuando los prisioneros liberados llegaron a sus hogares y contaron sus historias. La gente del norte se enfureció. Como el General John H. Winder, comandante del puesto, había muerto antes del final de la guerra, toda la responsabilidad de Andersonville cayó en las manos del Capitán Henry Wirz. Wirz, comandante de la zona interior de la prisión, fue juzgado por un tribunal militar en Washington D. C. El inmigrante suizo fue declarado culpable de conspiración y daño a la salud y vida de prisioneros Federales, y del asesinato en infringimiento de las leyes de guerra. Fue ahorcado el 10 de noviembre de 1865. Aunque hubo muchas declaraciones, sobre todo por parte de antiguos prisioneros furiosos, parece que no hubo delito de conspiración. El Capitán Wirz mencionó que sólo seguía las órdenes de sus superiores, y que no podía obtener la comida y suministros necesarios para el cuidado de un número tan grande de prisioneros. El fiscal en su juicio hizo un gran esfuerzo para entender cómo un hombre pudo permitir tales atrocidades, esta es una pregunta que, incluso hoy en día, se mantiene en las mentes de mucha gente y en la conciencia de la nación entera.

 

Andersonville se ha comparado frecuentemente con muchas otras de las prisiones de la Guerra Civil. Pero ¿Se pueden comparar? Todos los campamentos de prisioneros eran lugares horribles, y en cualquier momento tuvieron condiciones similares.

 

En el Campamento Douglas en Chicago, Illinois, el 10 por ciento de los prisioneros Confederados murieron durante un mes muy frío ; y la Prisión de Elmira en el estado de Nueva York, con un nivel de mortalidad del 25 por ciento, casi igualó al de Andersonville. Cada una es una parte de las peores tragedias de nuestra nación. El prisionero de la Guerra Civil John Ransom escribió en su diario en junio de 1864:

 

“Hace años leí cosas sobre los prisioneros de la Guerra de la Revolución y otras guerras. Era noble y heróico el ser un prisionero de guerra, y los relatos sobre sus aventuras eran muy románticos. Pero el romance ha sido eliminado del tema de los prisioneros de guerra. Es un fraude”.

 

Aquí pueden salir de sus vehículos, si lo desean, para mirar los pozos y túneles de escape. Pueden también encontrar un monumento erigido por su propio estado. Por favor, recuerden que deben pausar o parar esta grabación ahora para que esté preparada cuando vuelvan.

 

Andersonville Lugar Histórico Nacional conmemora a todos los prisioneros de guerra de toda la historia de la nación. Los monumentos de los estados, los pozos y túneles que fueron excavados por los propios prisioneros, además del Cementerio Nacional son monumentos para estos prisioneros. El propósito de un monumento es, no sólo conmemorar el pasado, sino educar en el presente.

 

Esto finaliza el tour del lugar de la prisión. Salgan de su lugar de aparcamiento, conduciendo hacia su izquierda. En la intersección, tendrán la opción de continuar con el tour del Cementerio Nacional de Andersonville o retornar al Museo. Si desean realizar el tour del Cementerio continúen hacia la señal que dice “Cementery Tour Begins” y párense. Continúen con el tour cuando la narración comience.

 

Si no desean realizar el tour del Cementerio, por favor paren ahora y vuelvan al Museo. Muchas Gracias.

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Duration:
26 minutes, 53 seconds

This is a 30-minute narrated Spanish driving tour of the prison site that can be downloaded and burned to disc or .mp3 player. This video has been translated by Carmen Hernández.

 

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Bienvenidos al tour del Cementerio Nacional de Andersonville. Para que puedan ver todos los aspectos interesantes del Cementerio con más facilidad, este tour estará orientado al lado derecho de su vehículo.

 

El Cementerio Nacional de Andersonville fue creado como resultado de las condiciones que causaron la muerte de miles de prisioneros de guerra de la Unión que estaban capturados en el Campamento Sumter. La primera persona que murió fue Adam Swarner el 27 de febrero de 1864. El soldado Swarner, miembro del Segundo Regimiento de Caballería de Nueva York, había sido arrestado en cárceles Confederadas en Richmond, Virginia desde que fue detenido en septiembre de 1863. Swarner fue uno de los primeros prisioneros que fue transferido a la nueva prisión en Georgia, y llegó muy enfermo y moribundo.

 

Cuando la guerra finalizó en la primavera de 1865, cerca de 13.000 hombres habían sido enterrados en este lugar. Fueron sepultados todos juntos en zanjas que sirvieron de tumbas. Estas sepulturas fueron marcadas con una pequeña tabla de madera con el número de sepultura engravado. Ese número correspondía con la lista de fallecidos que los cirujanos Confederados tenían. Este trabajo con las listas fue designado a un prisionero en libertad condicional. Dorence Atwater, que era un camarada de Adam Swarner en el Segundo Regimiento de Caballería en Nueva York, mantuvo la lista de fallecidos durante la mayoría del tiempo que estuvo en Andersonville. El temía que el gobierno Confederado no iba a declarar el verdadero número de fallecidos de la Unión, e hizo una copia de la lista en secreto, la cual mantuvo guardada hasta su liberación a comienzos del año 1865. Esta lista fue entregada al Departamento de Guerra de los Estados Unidos.

 

La parada número 1 está un poco más adelante en la zona del Monumento de Georgia, localizado en la zona circular dentro del muro de ladrillo del cementerio.

 

En julio de 1865, la Señorita Clara Barton, conocida como “el Ángel de la zona de Batalla”, por su trabajo como enfermera para con el ejército de la Unión, llegó a Andersonville con una expedición del Departamento de Intendencia que estaba regido por el Capitán James Moore. La expedición del Capitán Moore incluía 40 trabajadores que pintarían, señalizarían y construirían

 

marcaciones de madera para cada tumba. Dorence Atwater también volvió a Andersonville para asistir con el trabajo. El proceso de marcar las tumbas fue completado a mitad de agosto.

 

Hoy en día, el Cementerio Nacional de Andersonville permanece en funcionamiento. Veteranos militares de los Estados Unidos pueden ser enterrados aquí junto con sus esposos o esposas y sus familiares dependientes menores. Algunos de los requerimientos son que el veterano o veterana debe haber estado en activo por más de 180 días y si hubiera sido destituido o destituida de su trabajo militar, esta destitución debería haber sido una baja de tipo honorable. Por favor, recuerden que las 27 hectáreas del cementerio contienen los restos mortales de hombres y mujeres que sirvieron este país en todos los grupos del ejército de los Estados Unidos. Por favor, sean respetuosos manteniendo sus voces bajas, no se sienten o se sitúen encima de los monumentos o lápidas, y caminen en todo momento. Puede que lleguen al cementerio durante un entierro. Durante esos momentos la zona de carretera o camino que lleva al evento estará cerrada. Por favor evite esa zona del tour.

 

Si lo desean, pueden aparcar sus vehículos en la zona cerca del muro de ladrillos pero dejen libre la zona donde transita el tráfico, para que puedan observar de cerca el Monumento de Georgia. Este monumento fue construido en 1976, como un memorial para todos los prisioneros de guerra Americanos. El artista, William Thompson, dedicó el monumento al grupo de prisioneros de guerra independientemente del conflicto en el que lucharan.

 

El también quiso mostrar la dependencia que los prisioneros tenían entre ellos en lo que se refería a su camaradería y apoyo mutuo. Quizá deseen explorar un poco. Pueden observar algunos marcadores individuales y los estados representados por los soldados enterrados aquí. Si caminan hacia su derecha, después de entrar en el cementerio, podrán encontrar la lápida de Adam Swarner en la última fila de la Sección K, Tumba número 1.

 

Por favor continúen con el tour hacia la parada número 2.

 

 

Mientras conducen podrán ver el Monumento de Iowa a su derecha. Este fue dedicado el 17 de noviembre de 1906, y muestra a una mujer llorando. Durante la ceremonia de inauguración, el Gobernador de Iowa comparó la figura con el estado entristecido por los hijos que perdió.

 

El Monumento de Connecticut fue autorizado por la legislatura del estado en 1905 para conmemorar a los soldados de Connecticut de la Guerra Civil que fueron aprisionados en Andersonville. Fue acordado, entre el artista y la comisión para la construcción del monumento que la figura debería representar a un hombre joven, cuya expresión sería la del coraje y heroísmo que proceden del sufrimiento con fuerza, modestia y esperanza. La ceremonia de inauguración fue el 23 de octubre de 1907.

 

El Monumento de Nueva Jersey también muestra la figura de un soldado y representa a los 235 soldados de este estado que murieron aquí. En la zona inferior se encuentra la inscripción “Muerte Antes Que Deshonor”. Esta inscripción es común en 5 monumentos aquí localizados, y apunta al hecho de que los prisioneros de Andersonville podrían haber recibido su liberación si hubieran aceptado luchar por la causa Confederada. El Monumento de Nueva Jersey fue inaugurado el 3 de febrero de 1899.

 

Hay muchos ejemplos de hermanos capturados y puestos en prisión en Andersonville. En la primera fila de la sección J, pueden ver la tumba de Jacob Swarner, con el número 4005. Jacob Swarner murió el 26 de julio de 1864, casi exáctamente 5 meses después de la muerte de su hermano Adam, enterrado en la lápida número 1. Mientras ven la gran cantidad de filas de tumbas, pueden sentir el impacto del alto nivel de mortalidad en Andersonville.

 

En las secciones J y K hay tumbas con designaciones “USCT”. Estas son sepulturas de soldados Afro-Americanos, muchos de ellos eran esclavos liberados, que lucharon en el ejército de la Unión. Un ejemplo es la sepultura número 2790, donde está enterrado el soldado Alexander Whitaker. El era un miembro del Octavo Regimiento de las Tropas de Color de los Estados Unidos. También están enterrados aquí los miembros del famoso Regimiento 54 de Massachusetts. Pueden encontrar al Cabo James H. Gooding en la tumba número 3585. Ambos veteranos fueron apresados en la Batalla de Olustee en el norte de Florida en febrero de 1864.

 

Por favor continúen hacia la parada número 3, en la zona del mástil de la bandera que está más adelante.

 

En la temprana mañana del 17 de agosto de 1865, con la tarea de identificar a los fallecidos y marcando los sepulcros completados, la Expedición, mandada a identificar y marcar las tumbas, se reunió alrededor del mástil de bandera que había sido recientemente construido para

 

proceder con una inauguración formal del cementerio. La Señorita Clara Barton escribió acerca de este evento en su diario.

 

“El Capitán me llamó para ir a subir la bandera, y ésto en Andersonville, donde duermen 13.000 mártires, donde la bandera de este país unificado ha ondeado por primera vez en estos 4 años oscuros. Todo estaba preparado y me moví al lado del Señor Walker, y juntos alzamos la bandera en medio de las aclamaciones de los espectadores. Allí arriba la bandera cayó como si estuviera triste y en duelo. Hasta que finalmente el viento la levantó y la luz del sol brilló sobre ella para que todos la vieran. Los hombres empezaron a cantar el himno “Estandarte Estrellado” y yo me cubrí la cara y lloré. Tres salvas fueron disparadas, cada una representando los colores de la bandera, y luego volvimos al campamento para tomar el desayuno. El trabajo estaba terminado, mis manos ayudaron a subir la bandera en nuestro gran suelo sagrado y yo estaba satisfecha, creo que sí”.

 

Si hay un entierro, no podrán seguir a las paradas número 4,5 y 6. Estas zonas del cementerio serán inaccesibles con sus vehículos. Pero pueden escuchar el texto del tour desde la zona circular con el asta de la bandera si lo desean. También pueden visitar las secciones I y J caminando desde esta localización. Por favor, recuerden que deben ser respetuosos y mantener la voz baja .

 

Si toman la calzada situada a su derecha, por favor continúen el tour hacia la parada número 4.

 

 

Después de girar a su derecha desde el asta de la bandera, podrán ver las sepulturas de los 6 cabecillas del grupo de los Raiders, que fueron ahorcados dentro de la zona empalizada de la prisión el 11 de julio de 1864. “Raiders” fue el nombre que se les dio a los grupos criminales de prisioneros que se aprovecharon de sus camaradas, robando cualquier cosa de valor que los soldados pudieran tener, y muchas veces los mataron para poder obtenerlos. Un miembro del grupo Raiders, William Collins rompió la soga de su verdugo, pero los prisioneros se aseguraron de que fuera ahorcado por segunda vez. Como eran soldados deshonrosos, los otros prisioneros los enterraron separados de las otras tumbas.

 

Por favor, continúen a la parada número 5.

 

El Monumento Stalag XVII-B, que fue inaugurado el 3 de mayo de 1989, se encontrará a su derecha. Se inauguró en el cuadragésimo cuarto (44) aniversario de la liberación de los prisioneros stalags al final de la Segunda Guerra Mundial. Este monumento fue construido para honrar a los prisioneros de Stalag XVII-B y a todos los prisioneros capturados en campamentos de prisioneros de guerra alemanes.

 

Al mirar a su derecha y a la izquierda de la rotonda, verán filas de lápidas. Esta es la Sección Memorial. Los monumentos funerarios fueron construidos para recordar a los soldados cuyos cuerpos no pudieron ser recuperados del campo de batalla, a los que donaron sus cuerpos para la investigación científica, a los que fueron enterrados en el mar o a los que tuvieron sus cenizas esparcidas.

 

Continúen alrededor de la rotonda hacia la parada número 6. La estructura imponente es la Tribuna, en inglés, “Rostrum”. Esta fue finalizada en noviembre de 1941 y fue construida por el Ejército de los Estados Unidos para celebrar ceremonias especiales, todavía tiene esta utilidad en el día de hoy. El emblema en la parte frontal es el primer Sello Oficial de la Oficina de Guerra de los Estados Unidos, que fue creado en 1778. Consecuentemente, el Ejército también tomó este emblema al mismo tiempo. El Cementerio Nacional de Andersonville fue administrado por el Departamento del Ejército desde su creación en 1865 hasta 1970, cuando se convirtió, al igual que la prisión, en el Sitio Histórico Nacional de Andersonville.

 

En la parada número 6 tendrán la oportunidad de salir de sus vehículos y explorar la zona restante de la Sección Memorial y la Sección I. Si salen de sus vehículos, por favor no bloqueen las carreteras que van hacia la rotonda y no aparquen en las carreteras marcadas con la señal “No Entren” (“Do Not Enter”). Entre todas las lápidas a su derecha está la de Luther Story, que recibió la Medalla de Honor por su heroísmo durante la Guerra de Corea. El Cabo Story creció cerca de Americus, Georgia y se le vio por última vez tirando granadas a los enemigos que se acercaban a la vez que su pelotón se aproximaba a la parte trasera de las líneas de batalla. El cuerpo del Cabo Story no pudo ser recuperado. La Medalla de Honor fue otorgada al Cabo Story por el Presidente Truman el 2 de agosto de 1951.

 

La sección I es una zona del cementerio donde han tenido lugar entierros más recientemente. Entre estos entierros se pueden mencionar los de dos soldados cuyos cuerpos fueron trasladados a esta zona después de muchos años en cementerios privados. Sampson B. Kitchens está

 

enterrado en la sepultura número 957. El pertenecía al Regimiento Décimo de Georgia, Compañía C, durante la Guerra Civil y murió en 1934. Por lo que se sabe, es el único soldado Confederado enterrado en el cementerio. Su lápida acaba en forma de punta en lugar de ser redondeada, en su parte superior. En la tumba número 1.128 están los restos mortales de un veterano de la Guerra de la Revolución Americana, Jeremiah H. Dupree. El alférez Dupree era miembro de la Milicia de Virginia y murió en 1838.

 

Por favor, continúen a la parada número 7. Conduzcan hacia el asta de bandera y giren a la derecha en el zona circular.

 

A su derecha, mientras continúan conduciendo, verán el Monumento de Indiana, dedicado a los soldados de ese estado que murieron durante su confinamiento en Andersonville. Fue inaugurado el Día de Acción de Gracias, el 26 de noviembre de 1908. Su inscripción que dice: “Con mucha pena por sus sufrimientos, pero una mayor admiración por su determinada fidelidad”, acertadamente rinde un homenaje a todas las víctimas encarceladas en este tipo de campos de prisioneros. En el centro de la Sección I pueden encontrar el Monumento de Maine, construido en 1904. El soldado en la parte superior está de cara al norte. Observen el Monumento de Pennsylvania a su derecha después de girar en la rotonda. Este fue construido en memoria de los 1.849 soldados de ese estado que se encuentran enterrados en este cementerio. Fue inaugurado el 7 de diciembre de 1905 y la inscripción incluye un poema escrito por John E. Barrett. Pueden acercarse al monumento para leer el poema y las demás inscripciones. En la parada número 7 y en la segunda fila de lápidas pueden observar la tumba número 2.286.

Pueden ver que muestra un escudo indentado. Esta lápida pertenece a un veterano de la Guerra Española-Americana, su nombre era Burton Cole, y murió en 1980 cuando tenía 101 años.

 

Por favor, continúen hacia la parada número 8.

 

 

Observen las similitudes entre las lápidas en esta sección y la de Burton Cole. El estilo de la lápida oficial, mostrando un escudo, es el mismo que el usado en los entierros de la Guerra Civil y la Guerra Española-Americana. La Sección H es la más grande cuando se refiere a los entierros de la Guerra Civil, con 5.586 tumbas. Una lápida muy original es la de Lewis Tuttle, que es la número 12.196, localizada bajo el roble grande en la parte trasera de esta sección. Este soldado de Maine, tiene una paloma de piedra encima de su marcación. Esta fue creada al mismo tiempo que la inauguración del Monumento de Maine. ¿Hay alguna conexión entre los dos? ¡No lo

 

sabemos! Las circunstancias acerca de la paloma son el misterio de nuestro cementerio. El hermano de Lewis Tuttle, David, también está enterrado aquí, en la tumba número 12.322. Otra tumba muy singular es la número 12.607. James Wiley es el único prisionero enterrado en Andersonville al que se le otorgó una Medalla de Honor durante la Guerra Civil. Se le fue concedida por la captura de la Bandera Confederada durante la Batalla de Gettysburg en 1863. Seguramente murió sin saber el honor que se le iba a rendir. Una tumba adicional en la Sección H, que recibe mucha atención, es la de Martin Blackburn de Pennsylvania. Fue una de las figuras históricas presentadas en la película “Andersonville”, que fue estrenada en televisión en 1996. Su tumba es la número 10.674. Si caminan a través de la Sección H, verán un gran número de lápidas con la inscripción “Soldado de los Estados Unidos Desconocido”. Aunque hay muchas de ellas en esta sección, sólamente 460 de los 12.920 hombres que murieron en Andersonville fueron enterrados como desconocidos. Si desean explorar esta sección, por favor paren esta grabación ahora.

 

Por favor continúen hacia la parada número 9, en la rotonda un poco más adelante.

 

 

El monumento dentro de la zona circular fue construido en 1985 en honor a los soldados desconocidos enterrados en el cementerio. Este es un buen momento para explorar las Secciones A, B y C, si lo desean. Por favor, aparquen al lado del muro para dejar libre la carretera. Estas secciones estarán a su derecha cuando salgan de la rotonda. Las tumbas en la sección A pertenecen a los veteranos de la Guerra Española-Americana y la Primera y Segunda Guerras Mundiales. Las secciones B y C tienen los sepulcros de los soldados de la Guerra Civil que lucharon en diversos campos de batalla en los estados de Georgia y en el norte de Florida. Sus restos mortales fueron traídos a Andersonville para ser enterrados cuando terminó la guerra. Se desconoce la identidad de muchos de ellos. De los 900 entierros, 490 son los de soldados que no fueron identificados. Pueden observar que el espaciamiento es más tradicional en estas sepulturas si se comparan con las que están al otro lado de la carretera en la Sección H. Estos soldados fueron sepultados en ataúdes de madera. También están enterrados en estas secciones 66 víctimas de la viruela, que originalmente se encontraban enterrados en el pueblo de Andersonville. Cerca de la zona trasera de la Sección B está la tumba número 13.718, y contiene los restos mortales de dos soldados de la Unión, que fueron encontrados en 1899 después de una gran tormenta. Sus restos mortales fueron hallados dentro de la zona de los muros de madera, y la teoría es que murieron sepultados durante un derrumbe mientras intentaban escapar a través

 

de túneles que estaban construyendo. Por favor paren la grabación ahora si van a salir de sus vehículos para ver todo en más detalle.

 

Por favor, continúen con el tour.

 

 

Mientras conducen hacia el asta de bandera, en la parte trasera de la Sección C pueden ver el Monumento de Minnesota que fue construido en 1916. También pueden observar varias lápidas de ciudadanos civiles. Estas pertenecen a antiguos Supervisores del Cementerio o a sus familiares. Cuando el cementerio estaba bajo el control del Departamento del Ejército, el supervisor vivía en una casa grande de dos plantas en el borde del cementerio. Esta estructura fue construida en 1877, y en la actualidad es la oficina administrativa central del parque.

 

Por favor, continúen más allá del asta de bandera y sigan las señales del tour hacia la parada número 10 que está en el Monumento de Nueva York.

 

Por favor tengan precaución con el tráfico cuando entren en la rotonda y con los peatones que puedan estar cruzando la carretera.

 

El estado de Nueva York tenía el mayor número de soldados capturados en esta prisión y el mayor número de personas que murieron en Andersonville que ningún otro estado. El Monumento de Nueva York fue construido en 1911, pero no fue inaugurado hasta el año 1914. El comité para la inauguración recibió fondos monetarios de la legislación estatal para poder traer a la ceremonia al mayor número posible de supervivientes que estuvieron presos en Andersonville. En la parte de atrás del monumento hay una escena muy emotiva. El relieve de bronce muestra a dos prisioneros de Andersonville con el muro de madera de la prisión detrás de ellos. La expresión de uno de ellos es de esperanza, pero la de la otra persona es de abatimiento. Hay una figura adicional y es la de un ángel que está bajando. Esta imagen muestra la fé y camaradería necesaria para sobrevivir la vida en la prisión. Si lo desean pueden salir de sus coches para observar esta escena además de otros sepulcros cercanos.

 

Continúen el tour pasando las Secciones E y F, que contienen tumbas del Campamento Sumter.

 

 

En el centro de estas secciones está el Monumento de Illinois, construido en diciembre de 1912. La figura central es Columbia, que está señalando a los héroes que descansan en sus tumbas.

 

Youth y Maiden están mirando en esa dirección. Las figuras en cada uno de los lados representan a los veteranos que están de pie, tristes pensando en las tragedias de la guerra. Detrás del Monumento de Illinois se encuentran las extensiones de las Secciones E y F, éstas contienen lápidas de tiempos más actuales.

 

Si lo desean, pueden aparcar cerca del Monumento de Georgia y explorar el cementerio en más detalle. Recuerden que cada lápida histórica representa la tumba de un prisionero de Andersonville. Es muy difícil creer que el capricho del destino responsable de la muerte de estos hombres fuera un campamento de prisioneros de guerra que estuvo en funcionamiento solamente durante 14 meses. Esta tranquila y preciosa zona histórica ofrece la oportunidad para pensar en los sacrificios de estos hombres que murieron aquí, y puede sugerir pensamientos acerca del motivo que incita a la guerra y a la creación de campamentos de prisioneros de guerra.

 

Después de explorar la zona, si lo desean, pueden escuchar la selección de música que continuará en su retorno hacia el Museo. Le pedimos que, por favor, devuelvan el tour a la recepción del Museo cuando terminen con la selección musical.

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Duration:
26 minutes, 18 seconds

This is a 30-minute narrated Spanish driving tour of the National Cemetery that can be downloaded and burned to disc or .mp3 player. This video has been translated by Carmen Hernández.

 
A-Story-in-Stone-Title-Slide
A Story in Stone

NPS/C. Barr

A Story in Stone is a video series that highlights stories of some of the more than twenty thousand individuals buried in Andersonville National Cemetery. These videos are written, filmed, and produced by park staff and volunteers. These videos can be found here.

 
 
 
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Last updated: November 25, 2025

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